Semana tras semana, así como en la huelga general del pasado 14 de noviembre, los funcionarios y las funcionarias de la Administración de Justicia de Aragón siguen mostrando su rechazo a las políticas de recortes de este Gobierno, que están suponiendo una importante merma en nuestros derechos como ciudadanos en general y como funcionarios en particular. Más de 450 funcionarios con las camisetas amarillas de Justicia dan prueba de ello.
Desde aquí queremos señalar el seguimiento mayoritario
tanto de la huelga y de las distintas concentraciones, así como de la
participación en la manifestación, de todos los que trabajamos en la
Administración de Justicia en Zaragoza, y especialmente agradecer a los
compañeros que desde primera hora de la mañana el día de la huelga nos acompañaron a los Delegados y las Delegadas en las puertas del edificio de los Juzgados de la Plaza del Pilar y a lo largo
de todo el día. Fuimos el colectivo que más secundó la huelga general, junto al sector de Educación, en
la Administración Pública.
Más del cincuenta por ciento de la plantilla de Justicia no fue a
trabajar el día 14, si bien el seguimiento fue desigual ya que en algunas
unidades judiciales apenas hubo seguimiento mientras que en otras solo
funcionaron los servicios mínimos y teniendo en cuenta que se nombraron alrededor
del 30%, muchos de los cuales hubieran parado, se hubiese superado el 70%, y
hubiéramos sido muchos maá sino es por la situación personal límite a la que
esta llevando a muchos compañeros la Administración.
Los recortes, avisamos, no se van a acabar aquí. El Gobierno tiene previsto la "reforma de las Administraciones Públicas", lo que supondrá posiblemente nuevos recortes en derechos, económicos, pensiones, etc. El déficit sigue desbocado porque la austeridad impide que crezca el país, lo que a su vez genera más déficit, las pagas extras del próximo año están en el punto de mira, el Ministerio de Justicia aprueba reformas que conllevarán la movilidad forzosa fuera de la población y promueve iniciativas de privatización de la Justicia que junto con la implantación de las tasas judiciales supondrá que al final digan que sobra gente en los Juzgados.
Por todo ello, por lo que nos han recortado injustamente hasta ahora y por lo que va a venir, debemos seguir movilizándonos, salir a las concentraciones de los viernes y mostrar nuestro rechazo a los recortes en nuestros derechos y salarios, que tantos esfuerzos y sacrificios nos costó conseguirlos.
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