Teruel acogerá una prueba piloto en el 2012 y Huesca deberá esperar al palacio. Los juzgados civiles tienen 37.000 fallos por ejecutar y reciben cien casos diarios.
El Gobierno de Aragón aplazará la puesta en funcionamiento de la Nueva Oficina Judicial (NOJ) en Zaragoza hasta que los juzgados unipersonales estén concentrados en el complejo de Ranillas, según anunció ayer la directora general de Justicia, Tomasa Hernández, ante la Comisión Institucional de las Cortes.
Ocurrirá algo similar en Huesca, donde la NOJ no se desarrollará antes del traslado de los tribunales al Palacio de Justicia. Por el contrario, Teruel acogerá una prueba piloto del nuevo sistema a partir del segundo semestre del año que viene.
La NOJ consiste en una reorganización funcional y de personal de cada una de las jurisdicciones en la que la mitad de la plantilla se integrará en los llamados servicios comunes, que realizarán para todos los órganos de su jurisdicción tareas como el registro o la ejecución, entre otras.
El proceso incluye retos como consensuar una nueva Relación de Puestos de Trabajo (RPT) con jueces, secretarios y funcionarios que resulte adecuada para procuradores y abogados. El sistema requiere, por otro lado, un adecuado equipamiento informático de los juzgados. Hernández señaló que ambas necesidades operan como premisas para establecer la Nueva Oficina Judicial.
OBSOLETO En el caso de los sistemas informáticos, la responsable autonómica de Justicia adelantó que, tal y como hizo con el Gobierno central saliente, reclamará al entrante una adecuada dotación de medios en este capítulo. Hernández abogó por eliminar el programa Minerva por "obsoleto".
Los jueces llevan años pidiendo que en el partido judicial de Zaragoza entre en funcionamiento el servicio común de Ejecución de Sentencias de la jurisdicción civil, especialidad que se encuentra al borde del colapso y cuya carga de trabajo se ha disparado como consecuencia de la crisis.
Según los datos del Consejo General del Poder Judicial, los juzgados zaragozanos de esta materia tenían al finalizar el segundo trimestre pendientes de ejecución 37.186 sentencias, lo que supone que el atasco se ha incrementado en 2.495 en dos años.
Los tribunales de Primera Instancia, los de lo Mercantil y los de familia de Zaragoza, que atienden a más de 800.000 habitantes, recibieron entre el 1 de abril y el 30 de junio un total de 9.077 asuntos, lo que supone una media de 137 por jornada laboral frente a los 118 --una sexta parte más-- del verano del 2009.
"Nuestro objetivo es la optimización y formación de los recursos humanos, la mejora de instalaciones y el uso de nuevos medios técnicos", dijo Hernández, que señaló que la puesta en marcha de la NOJ requerirá "consenso, negociación y mejora de las infraestructuras".
El Periódico de Aragón, 23.11.2011
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